A decir verdad ya conocía este concepto, pero cuando volví a escuchar sobre él hace poco algo hizo eco en mi interior. Digo interior y no cabeza porque fue algo más integral, no podría describir la sensación como no sea recurriendo a la palabra "vibración" Sentí una vibración en todo mi cuerpo.
Descubrí después que la razón no estaba oculta. En mi día a día desoí su significado más profundo y que se extiende más allá del Kendo o el uso del sable.
Literalmente "Ki Ken Tai Ichi" podría significar "Energía, Espada, Cuerpo, Uno" En el budo, Ki Ken Tai Ichi sería la unificación en un instante de los elementos esenciales del artista marcial para lograr un golpe perfecto. Ese concepto puede aplicarse a todos nuestros actos; unificando nuestra intención, cuerpo y herramientas para lograr cualquier objetivo. En efecto hay acciones que requieren que nos concentremos en un solo punto y nos dirijamos hacía él como un bloque, con total determinación, sin titubeos.
Desde luego la flexibilidad no es aquí una contradicción y para que ella sea posible es necesaria la conciencia de la unión que ha sido creada.
Estoy segura de que la vibración fue un reconocimiento espontaneo y consciente del error que venía cometiendo. Mi energía se encontraba dispersa por doquier.
¿Las consecuencias? Mi cuerpo había perdido gracia; mis intenciones no contaban con el peso suficiente para generar un cambio en la rutina; mi mente se perdía fácilmente en lo banal y superfluo. Uso el pretérito para describir esas consecuencias, porque he vuelto a concentrarme y no dudo en que se notará en estas letras.
Mi intención con ellas no es desahogarme sino hacer una pregunta, dejarla en el aire e imaginar que quizás sea la pregunta que alguien necesita responder.
¿En qué se van tus energías?
----------
Hoy me animo a agradecer a Franco, Ariel y Julieta por la inspiración que generan en mi sus esfuerzos y actitudes por mejorar en el arte que realizan.