Náufragos Celestes

domingo, 18 de agosto de 2013

Viajera inesperada


Cuando la sombra del cambio comienza a cubrirme suelo levantar la cabeza y mirar las estrellas, no para buscar algún tipo de aprobación por lo que habré de decidir, sino para sentirme respaldada por las que siempre han visto mis actos, fieles testigos de mi forma de ser y mis intenciones, no creo que haya techo de nubes o concreto que pueda resistir sus miradas ancestrales. 

 En la oscuridad de mi habitación la duda como un cuervo acecha inquietante, no se la puede ignorar o asustar fácilmente; solo la convicción verdadera puede tenderme la mano en las horas de silencio...¡Cuantas veces se ha hecho esperar últimamente!

Busco refugio en tu amor, entre sus pilares nada puede dañarme, todo se vuelve sensación y espontaneidad, la suave brisa de una tarde se convierte en algo más, en una caricia divina, en el manto de amor de la creación.

Decidida, solo queda pasar del mapa al camino, viajera inesperada en un paisaje de aventuras.